Charles Chaplin en el papel de "Calvero" en "Candilejas" (1952) |
"Yo sé que soy gracioso pero los agentes piensan que mi tiempo ha pasado. ¡Dios! Sería fantástico conseguir que se tragaran sus palabras. Eso es lo que más odio de envejecer, el desprecio y la indiferencia que te demuestran. Piensan que no sirvo... Es por ello que sería maravilloso volver... Quiero decir que sería sensacional, conseguir que se partieran de risa..."
Son palabras que Charles Chaplin pone en boca de "Calvero" uno de los protagonistas de su única novela "Footlight" (1948), una obra de reciente publicación -75 años despues de su creación- y que en su día sirvió de inspiración para "Candilejas" (Limelight -1952), uno de los mejores trabajos de Charles Chaplin como director y en el que él mismo encarnó al personaje de "Calvero".
El libro cuenta una historia muy similar a la de Candilejas, la historia de un cómico que ha perdido contacto con su público, que sufre de constantes pesadillas y que se encuentra deprimido y desencantado con su carrera. Los personajes de la novela son prácticamente paralelos a los del film, allí están el cómico Calvero, alcohólico y mayor de edad que termina salvando del suicidio a la bailarina Thereza (en la película le da vida la hermosa Claire Bloom) a la que después le enseñará todos los secretos del mundo del espectáculo.
Aparte de su calidad, si por algo es mítica "Candilejas" es porque en ella se produce el maravilloso encuentro de los dos grandes mitos del cine de humor: el propio Charles Chaplin y Buster Keaton. Hay quien cuenta al respecto que Chaplin tuvo que reducir algo el papel otorgado a Keaton por temor a que este tomara demasiada presencia en el film y acabara por robarle protagonismo.
Cuando Chaplin escribió la novela su persona se empezaba a encontrar muy cuestionada en Estados Unidos por la campaña en su contra que estaba realizando el Comite de Actividades Antinorteamericanas y que le llevaron a tener que abandonar Estados Unidos. La maquinaria puesta en marcha por McCarthy había logrado que una parte importante de la población estadounidense se olvidara de las sonrisas que durante décadas les había regalado Charlot y ahora solo veían a Chaplin, sus problemas de faldas y supuestas filiaciones comunistas. Todavía nos entregaría alguna película más, como las deliciosas "Un rey en Nueva York" o "La condesa de Hong Kong", pero sus palabras en la novela, las arriba recogidas, serían proféticas; la consolidación del cine sonoro, contra el que el luchó con todas sus fuerzas, no dejaba sitio ya para su vagabundo y Chaplin se vio obligado a colgar el bastón y el bombín del eterno Charlot, ese personajillo que ahora cumple 100 años, los que han pasado desde aquel 7 de febrero de 1914 en el que Chaplin le dió vida por primera vez en su película "Carreras de autos para niños" (Kid Auto Races at Venice).
Y en contra de los grises pensamientos de Chaplin el mundo se sigue riendo con él.
Os dejamos un vídeo homenaje a Charlot que le han dedicado en "Días de Cine" (Rtve) y del que ellos mismos facilitan su enlace:
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