jueves, 6 de junio de 2013

Ha fallecido Esther Williams, la sirena de Hollywood

 

A la edad de 91 años nos deja la que fue conocida como "La sirena de Hollywood": Esther Williams, un bellezón que hacía las delicias de los espectadores con sus evoluciones bajo el agua y las coreografías que idearon para ella. Su imagen en bañador fue una de las postales preferidas por los soldados para adornar sus taquillas, una verdadera pin
up acuática. Sus películas no podían alejarse mucho del agua como ella misma reconocía:

“Hollywood me trató muy bien. Era una niña mimada, pero la fórmula de mi éxito era el agua y no podía ser otra, de manera que nunca llegué a interpretar un papel dramático con éxito“

Y es que su éxito estaba indisolublemente unido al agua y como dijo Fanny Brice, una cómica de la época, sobre Williams: “Mojada es una estrella, seca no es nada”.

Era una gran nadadora y de no ser por la Segunda Guerra Mundial seguro que se habría llevado alguna que otra medalla en las suspendidas Olimpiadas de 1940. Poco después empezó a realizar exhibiciones con el también nadador Johny Weissmüller, no tardando los estudios en fijarse en ella y darle una oportunidad. Ella contaba sobre sus inicios:

"Me habían hecho unas primeras pruebas que gustaron al señor Mayer. Me llamó un día para verme actuar. Me dijo que me daría la réplica un actor de la casa. Yo pensé que sería cualquier principiante. ¡No puede imaginarse cómo me sentí cuando me recibió Clark Gable, con aquella sonrisa ancha y luminosa! Era mi actor preferido”.

“En MGM tenían un sistema basado en la búsqueda del talento dondequiera se encontrase. Sabían descubrirlo y colocarlo en el sitio adecuado. Cuando quisieron hacer el mejor Tarzán de la historia descubrieron a Johnny Weissmüller. Si querían rodar películas acuáticas me descubrían a mí. ¿Cómo sabían que yo aspiraba a hacerlas? ¡Misterio! Lo bueno es que coincidimos en el mismo deseo la MGM y yo”.

Cuando estrenó "Escuela de Sirenas" en 1944 la cosa resultó todo un éxito, dando carta de nacimiento a un nuevo género cinematográfico que casi nacería y moriría con ella, el musical acuático. Fueron nada menos que 26 películas acuáticas, títulos míticos como la ya mentada "Escuela de sirenas", "Juego de pasiones", "Ziegfeld Follies", "La hija de Neptuno", "Fiesta brava" o "Take me out to the ball game ".
 


 Cuando ya estuvieron de capa caída estos musicales Esther Williams se pasó temporalmente a los dramas con películas como "Sombras de la noche" , "Momento inesperado" y "El gran espectáculo". Ella tampoco estaba mucho por la labor y lo explicaba:

“Mi retiro coincidió con el final de una época. Con el auge de la televisión todo cambió demasiado. También la mentalidad de los productores. Yo tuve que mantenerme en mis trece, a fin de preservar mi dignidad estelar. Me dije: ‘Si ellos no quieren hacer mi género, yo no quiero hacer los de ellos’. Antes hacíamos cine. De pronto nos volvimos empleados y eso no me gustó”.

Descanse en paz la única sirena que se mostró a nuestros ojos

American History X (Tony Kaye, 1998).- Fragmentos del guion



" El tiempo de odiar es pasajero, pero el tiempo de amar perdura."

"Siempre viene bien terminar un trabajo con una cita, Dereck dice que siempre hay alguien que lo ha hecho mejor que tú y que si no puedes superarlo, róbaselo y aprovéchate: "No somos enemigos, sino amigos, no debemos ser enemigos. Si bien la pasión puede tensar nuestros lazos de afecto, jamás debe romperlos. Las místicas cuerdas del recuerdo resonarán cuando vuelvan a sentir el tacto del buen ángel que llevamos dentro".

"Supongo que ahora debo decirle lo que he aprendido,mi conclusión.Pues mi conclusión es que el odio es un lastre. La vida es demasiado corta para estar siempre cabreado.No merece la pena. "

"- ¿Alguna vez has hecho algo que mejorara tu vida?
- No... Ayúdame. "


"¿Crees que estás ahí solo, que eres el único que está cumpliendo condena?"

"Maté a dos tíos. Los maté y no hizo que me sintiera distinto. Sólo me perdía más aún. Y ya estoy harto de estar cabreado; estoy harto."

"Son las 5:40 y dentro de un minuto voy a ver como sale el sol, creo que no lo he hecho nunca, en fin , vamos a intentar recoger las cosas y volver a empezar, no será fácil, pero volvemos a estar juntos y me siento bien, no se si este trabajo es lo que quería, si ha captado el fondo social o lo que quiera que esté buscando, pero si le sirve de algo, muchas gracias".

Tagore.- El último trato



Una mañana iba yo por la pedregosa carretera,
cuando espada en mano, llegó el Rey en su carroza.
"¡Me vendo!", grité. el Rey me cogió de la mano y me dijo:
"Soy poderoso, puedo comprarte." Pero de nada le valió su poderío
y se volvió sin mí en su carroza.

Las casas estaban cerradas en el sol del mediodía
y yo vagaba por el callejón retorcido
cuando un viejo cargado con un saco de oro me salió al encuentro.
Dudó un momento, y me dijo: "Soy rico, puedo comprarte."
Una a una ponderó sus monedas. Pero yo le volví la espalda y me fui.

Anochecía y el seto del jardín estaba todo en flor.
Una muchacha gentil apareció delante de mí, y me dijo:
"Te compro con mi sonrisa." Pero su sonrisa palideció
y se borró en sus lágrimas. Y se volvió sola otra vez a la sombra.

El sol relucía en la arena y las olas del mar rompían caprichosamente.
Un niño estaba sentado en la playa jugando con las conchas.
Levantó la cabeza y, como si me conociera, me dijo:
"Puedo comprarte con nada." Desde que hice este trato jugando, soy libre.

La imagen pertenece a la película "Muerte en Venecia", de Luchino Visconti

Carta de Arthur Schopenhauer a su madre Johanna (1811)



“filósofo es aquel hombre que tiene el valor de no guardarse ninguna pregunta en el corazón” (Carta a Goethe, 1815)

«La filosofía es un elevado puerto alpino; a él conduce únicamente un sendero abrupto que transcurre entre piedras agudas y espinas punzantes; es solitario, y cuanto más se asciende, más desierto se torna. Quien por él transita no conocerá el miedo, abandonará todo tras de sí y, con perseverancia, tendrá que abrirse paso a través de la fría nieve. A menudo se detendrá de súbito ante el abismo y observará el verde valle allá en lo profundo: entonces, el vértigo se apoderará de él amenazándole con arrastrarle hacia abajo, pero deberá dominarlo, si es necesario, incluso clavando a las rocas con su propia sangre las plantas de los pies. A cambio pronto verá el mundo debajo de sí: ante su vista se esfumarán los desiertos y los pantanos, las desigualdades parecerán igualarse y las notas disonantes no le estorbarán más allá arriba; el orbe entero se extenderá ante su mirada. Él mismo se mantendrá siempre inmerso en el puro frío aire alpino y podrá saludar al sol cuando a sus pies aún se extienda la noche oscura.

Existe un consuelo, una esperanza segura, y ésta la experimentamos por medio del sentimiento moral. Si nos habla claramente, si surge en nuestro interior con tanta fuerza un móvil que nos anima a la acción dirigida hacia lo más grande; si a ese sentimiento estamos dispuestos a sacrificar incluso nuestro bienestar aparente y externo, entonces intuimos con facilidad que nuestro bien es de otro tiempo, un bien con respecto al cual de nada sirven todas las razones mundanas; advertimos que nuestro severo deber apunta a una felicidad más elevada de la que él es mensajero; que la voz que oímos en tinieblas proviene de un lugar iluminado. Pero ninguna promesa concede fuerza al mandamiento de Dios; antes bien, es su mandamiento en vez de la promesa… Este mundo es el reino de la arbitrariedad y del error; de ahí que sólo debamos aspirar a lo que no nos es robado por la arbitrariedad, y sólo afirmar y actuar según aquello en lo que no cabe la posibilidad de error alguno».

Rita Hayworth y Orson Welles: La bella y el cerebro



No cabe duda de que una de las grandes parejas de Hollywood fue la formada por Orson Welles y Rita Hayworth, uno el muñidor de una nueva manera de entender el cine y la otra una diosa encarnada en mujer que era el sueño de cualquier hombre, tal es así que los medios solían referirse a la pareja como "la bella y el cerebro". El matrimonio duró tan sólo duró cuatro años, de 1943 a 1947.
 
Welles se enamoró de la imagen de Rita, a través de una foto en una revista y delante de sus amigos dijo que al volver a Hollywood se casaría con ella, algo que logró. Pero no se puede uno casar con una imagen… Rita era Gilda en las fotografías pero en casa era Margarita Casino, una mujer sencilla, frágil y puede que hasta un pelín simple. Lejos de los focos Rita se apagaba y que Welles hiciera manifestaciones del tipo "Era aun más bella sin maquillaje" no eran suficientes para equilibrar una relación en la que él, un ser encantado de conocerse a sí mismo, era capaz de recitar de memoria obras completas de Shakespeare, mientras que ella apenas tenía estudios y soportaba la inseguridad que le había provocado el maltrato de su padre. En este ambiente Welles no desaprovechaba una sola ocasión para humillar a Rita y minusvalorarla.

La relación no tardó en explotar en mil pedazos y tras tener una hija no deseada por Welles, Rebecca, el matrimonio llegó a su fin. Se les escuchó multitud de declaraciones en los medios. Por un lado ella decía:

“No saben ustedes cuanto me esforcé por formar un hogar con el señor Welles. Pero a él no le interesaba el hogar. Todas las noches me decía que deseaba ser un hombre libre”.

Tiempo después refiriendose a su matrimonio decía Rita: El tiempo de la dicha»....Welles al enterarse, comentó a sus amigos con voz sombría: «Si aquello fue la felicidad, imaginad lo que habrá sido para ella el resto de su vida».

Por su parte Welles decía:

“No pueden darse una idea de cuánto me aburría con Rita”

“Las mujeres son idiotas en general, pero ella era la más idiota de todas.”

"Estaba convencido de que algún otro podría hacerla feliz, para mí era imposible y lo único que podía hacer era darle momentos de alegría durante la semana. Iba a pasarme la vida encontrándome con una mujer deshecha en llanto cuando volvía a casa. Me sentía muy culpable. La quería mucho. ¡Fue terrible!

"Podría haber intentado reparar los platos rotos, pero estaba al límite de mis fuerzas. Ese sentimiento de fracaso se había vuelto insoportable para mi. Había hecho todo lo que estaba en mi mano. Es como si yo solo le aportase tormentos. Me veía condenado el resto de mi vida a encontrarme a mi mujer llorando cada vez que volviese a casa"

Se cuenta que por estas razones el cineasta terminó lanzándose en brazos de otras mujeres y precipitando el divorcio. La frase lapidaría vendría finalmente de Rita Hayworth, y define todo lo ocurrido en este matrimonio que nace del glamour de una fotografía en una revista:

«Todos los hombres que conozco se acuestan con Gilda, pero se levantan conmigo»

El terminó perdiendo algo de su brillo y acumulando kilos sin fin, ella se convertiría poco tiempo después en la primera princesa del cine, al casarse con el príncipe Aga Kahn, siete años antes de que lo hiciera Grace Kelly con Rainiero (que parece que es la única en lograr el cuento de hadas)

Curiosamente un año después de su divorcio el destino los juntó para realizar una de las grandes obras del cine negro: "La dama de Shanghai"…..
Cuando a ella le preguntaron por la razón de acceder a realizar esta película dijo: "Se lo debía a Orson"… el resto de la historia de este sensacional film lo contaremos en breve, que también tiene su miga.

La fotografía que encabeza el artículo es una imagen promocional de "La dama de Shanghai"

 
Orson Welles y Rita Hayworth al ritmo de "When a man loves a woman" de Percy Sledge

The Keystone Cops - Persecuciones a gogó



Los que tengan el buen gusto de revisionar películas cómicas de los tiempos del cine mudo seguro que esbozarán una sonrisa al ver por aquí a los Keystone Cops, aquel curioso grupo de policías, notoriamente torpes e incompetentes, que mostraba una sobresaliente tendencia a caerse de todas las maneras posibles. Fueron una de las grandes creaciones del genial Mack Sennett (1880-1960), para su Keystone Film Company y sus cómicas persecuciones terminaron por convertirse en uno de los clásicos del primer cine y del slapstick. Se hicieron tremendamente famosos con el corto "Bangville Police" (1913) junto a Mabel Normand y terminaron por hacerse habituales en muchos otros trabajos hasta 1917. Con el tiempo acompañaron en sus aventuras a grandes genios del humor como Charlot o Fatty Arbuckle, quien curiosamente se enfundó el mismo durante una temporada el uniforme de los Keystone Cops, tal y como podemos ver en la foto (es el primero por la derecha). 



 
Los Keystone Cops en acción en el corto: Law and Order: Old School



El grupo, que oscilaba en torno a los 7 o 10 componentes, solía ir cambiando de película en película y el nombre de algunos de los actores que dieron vida a estos desaliñados policías aún permanece en el anonimato. La fotografía que abre esta entrada pertenece al corto "In the clutches of the gang" (1914) y en ella además de al ya mentado Arbuckle podemos ver a uno de los más reconocibles integrantes de los Keystone Cops, Edgar Kennedy, que es el policía que coge el teléfono. En el año 1955 Abbott y Costello les rindieron homenaje en una de sus comedias.
 
 


Miguel de Unamuno.- Sueños



"Cuando se muere alguien que nos sueña, se muere una parte de nosotros."


(Miguel de Unamuno)


Imagen: Óscar Kokoschka (litografía).- Mujer durmiendo (1907)

Pío Baroja por él mismo (Citas):

 
 

"Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta."

"Sólo los tontos tienen muchas amistades. El mayor número de amigos marca el grado máximo en el dinamómetro de la estupidez."

"La vida de sacrificios es más agradable casi siempre que la de amarguras."

"Soy un hombre curioso y que se aburre desde la más tierna infancia."

"La revolución es buena para los histriones. Sirven todos los gritos, todas las necedades tienen valor, todos los pedantes alcanzan un pedestal."

"Uno tiene la angustia, la desesperación de no saber qué hacer con la vida, de no tener un plan, de encontrarse perdido."

"El hombre: un milímetro por encima del mono cuando no un centímetro por debajo del cerdo. "

"Así como la desgracia hace discurrir más, la felicidad quita todo deseo de análisis; por eso es doblemente deseable."

"Si quieres hacer algo en la vida, no creas en la palabra imposible. Nada hay imposible para una voluntad enérgica."

"El hombre de nuestro tiempo, más que inmoral es bruto. Le gustan las diversiones estúpidas y un poco infantiles, quiere comer, beber y lucir. Lo mismo les pasa a las mujeres."

"Aunque tengamos la evidencia de que hemos de vivir constantemente en la oscuridad y en las tinieblas, sin objeto y sin fin, hay que tener esperanza."

"Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta."

"A una colectividad se le engaña siempre mejor que a un hombre."

"Debe ser grande el asombro de esos hombres discretos, previsores y sensatos al ver a muchos que, sin preocuparse gran cosa por las revueltas del camino, van llevados en alas de la suerte por iguales derroteros que ellos, y que tienen, ¡los insensatos! , además de la satisfacción de conseguir un fin, cuando lo consiguen, el placer de mirar a un lado y a otro de su ruta y de ver cómo sale el sol y se pone el sol, y cómo brotan las estrellas en el cielo de las noches serenas. "

"Un pueblo sin moscas quiere decir que es un pueblo limpio; un pueblo sin frailes revela que tiene buen sentido, y un pueblo sin carabineros indica que su estado no tiene fuerza; cosas todas que me parecen excelentes. "

"La ley es inexorable, como los perros: no ladra más que al que va mal vestido."

"Buscar la unanimidad por la violencia es labor baldía."

"La mujer es casi siempre realista, optimista y social: lo que hacen los demás tiene mucha fuerza para ella, y el camino solitario del inadaptado no le seduce."

"Las mujeres parecen primero ángeles, luego supone uno si serán demonios, y poco a poco empieza uno a comprender, que son hembras, como las yeguas, como las vacas..."

"El mérito para los snobs es hacer siempre descubrimientos. Así han llegado al dadaísmo, al cubismo y a otras estupideces semejantes."

"Viva el buen vino, que es el gran camarada para el camino."

"El hombre poetiza todo lo lejano."

"Somos grandes constructores de ilusiones, hasta que hacemos lo posible para derruirlas."

"España no ha tenido esas minorías selectas de cultura media de los países centroeuropeos. España nunca ha sido foco sino periferia. Algunos hombres extraordinarios, y luego, plebe."

"Al oírle se sospechaba si se trataría de un hombre de genio. Al ver su obra se comprendía que no era más que un descontento sencillo."

"Nos miramos todos con el odio característico con que nos miramos los españoles."

«Una novela larga será siempre una sucesión de novelas cortas.»

"Hemos llegado a querernos de verdad —decía Andrés—, porque no teníamos interés en mentir."

"Ya casi no hay hombres buenos ni malos, ni traidores por vocación, ni envenenadores por capricho. Hemos descompuesto al hombre, al conjunto de mentiras y verdades que antes era el hombre y no sabemos recomponerlo. Nos falta el cemento de la fe divina o de la fe humana, para hacer con estos cascotes una cosa que parezca una estatua."

"Me pareció tan bonita que no podía recordar luego cómo era."

"La música es un arte que está fuera de los límites de la razón, lo mismo puede decirse que está por debajo como que se encuentra por encima de ella."

"La gente goza de tan poca fantasía que tiene que recoger con ansia unos de otros esos pequeños adornos de la conversación. Son como traperos o colilleros de frases hechas."

"Es que la verdad no se puede exagerar. En la verdad no puede haber matices. En la semi-verdad o en la mentira, muchos."

"Dejemos las conclusiones para los idiotas."

"El cemento armado es una musa honesta y útil, y quizá en manos de un arquitecto genial sería admirable; pero cuando se desmanda y se siente atrevida, como una cocinera lanzada a cupletista, hace tales horrores, que habría que sujetarla y llevarla a la cárcel."

"El hombre: un milímetro por encima del mono cuando no un centímetro por debajo del cerdo."

"Así como la desgracia hace discurrir más, la felicidad quita todo deseo de análisis; por eso es doblemente deseable."

"La burocracia en los países latinos parece que se ha establecido para vejar al público"

"Siempre es simpático el que triunfa."

"Realmente, no sé si con justicia o no, a mí no me admira el ingenio, porque se ve que hay muchos hombres ingeniosos en el mundo. Tampoco me asombra que haya gente con memoria, por grande y portentosa que sea, ni que haya calculadores; lo que más me asombra es la bondad, y esto lo digo sin el menor asomo de hipocresía."

"Mucha gente piensa, o por lo menos siente, que el que no tiene sus hábitos y sus entusiasmos es un enemigo. A mí me parece lógica la intransigencia tratándose de ideas esenciales."

"La claridad en la ciencia es necesaria; pero en la literatura, no. Ver con claridad es filosofía. Ver claro en el misterio es literatura. Eso hicieron Shakespeare, Cervantes, Dickens, Dostoievski..."

"El psicoanálisis es el cubismo de la medicina."

"En la vejez no se hace más que repetirse."

"El niño ríe por alegría; es el primer escalón. El humorismo ríe con tristeza; es el último escalón. Aurora y crepúsculo."

"Cuando uno se hace viejo, gusta más releer que leer."

"Son los inocentes y no los sabios los que resuelven las cuestiones difíciles."

"La literatura no puede reflejar todo lo negro de la vida. La razón principal es que la literatura escoge y la vida no."

"La historia es siempre una fantasía sin base científica, y cuando se pretende levantar un tinglado invulnerable y colocar sobre él una consecuencia, se corre el peligro de que un dato cambie y se venga abajo toda la armazón histórica."

"Yo creo que la gente, cuando es inteligente y completamente normal, no debe pretender el ser rara y extraña, porque llega al absurdo inventado."

"La falsedad y el disimulo son útiles dentro de la vida social. Yo esta condición no la he tenido, y creo que el no tenerla me ha perjudicado más que otra cosa. También me ha perjudicado un poco, al tratar con propios y extraños, el no tener solemnidad."