sábado, 17 de septiembre de 2016

"La uvas de la ira": Hoy igual que ayer



Ma Joad - "¿Cómo voy a saber de ti? Podrían matarte y yo no me enteraría. Podrían herirte. ¿Cómo lo voy a saber?

Tommy Joad - Quizás sea como decía Casy. El hombre no tiene alma propia, sino un pedacito de un alma más grande, el alma grande que nos pertenece a todos, y entonces...

MJ - ¿Entonces qué, Tom?

TJ - Entonces, no importa. Estaré en la oscuridad. Estaré en todas partes. Allá donde mires. Allá donde se luche porque los hambrientos puedan comer, estaré yo. Allá donde un policía pegue a un hombre, estaré yo. Estaré en los gritos de los hombres  cuando están furiosos. Estaré en la risa de los niños cuando tienen hambre y la cena está lista. Y cuando la gente coma lo que cultiva y viva en las casas que construye, allí también estaré yo.


Estas palabras aparecían en  "Las uvas de la ira" (1940 - John Ford - EEUU), una maravillosa película que retrata la realidad de una crisis económica mundial, la del 29, que azotó duramente a todos, y muy especialmente a los más débiles económicamente, como sigue ocurriendo hoy día con esta crisis que todos dan por acabada pero que sigue moviendo frenéticamente el rabo como las lagartijas después de muertas. Sigue siendo una película con un discurso pleno de actualidad, siguen siendo legión los desheredados de esta crisis que no se va, los desahucios continúan a la orden del día y para muchos emigrantes, a pesar de la penuria económica reinante, España les sigue pareciendo la tierra de la que mana leche y miel y con una mano detrás y otra delante se juegan la vida cruzando el mar para llegar a lo que a ellos les parece el Paraíso, tal y como la familia Joad, de forma equivocada, veía a California en su interminable viaje por polvorientas carreteras,  Curiosamente el parlamento de arriba pertenece a la traducción literal de la película en inglés ya que en el doblaje al español se eliminó cualquier tipo de referencia a la brutalidad policial. Era tal la crítica social reflejada en la película que en España no se pudo estrenar hasta 1974. No debemos olvidar que la película es de 1940 una época ciertamente convulsa de la historia de nuestro país en la que muchos habían tenido que salir del mismo con todas sus pertenencias a cuestas y con los representantes de la ley de parte de los vencedores, algo que se mantendría durante años. Hasta Casy, el predicador al que da vida John Carradine, resulta un personaje inusual, un pastor de la iglesia que tras perder su fé se convierte en agitador de los necesitados animándolos a luchar por sus derechos, algo del todo inaceptable en nuestro país por aquellas fechas. Cuando muere el abuelo de Tom Joad, ese que no aceptaba abandonar una tierra que ya no era suya, Casy, el que era predicador, realiza una oración maravillosa después de que Tommy Joad lea la nota que dejarán junto a su cuerpo enterrado en medio de ninguna parte:

Tommy Joad - "Este hombre es William James Joad. Le dio un ataque y murió. Era ya muy muy viejo. Le enterró su familia porque no tenían dinero para pagar los funerales. No lo mató nadie. Le dio el ataque y murió" Sera mejor que dejemos este escrito con él, no vaya a ser que lo encuentre alguien y crean que lo asesinaron. A veces el gobierno se preocupa más por un hombre muerto que por uno vivo.

John Joad - No te pongas triste dejamos aquí su nombre con él; no es un muerto desconocido abandonado bajo tierra

Tommy Joad - ¿Por qué no dice una oración Casy?

Casy- Sabes que ya no soy predicador

Si ya lo se, pero nunca enterramos a nadie de la familia sin una oración

Casy - La diré. Pero corta. Este pobre anciano vivió una vida y al final murió. Yo no se si fue bueno o malo y no creo que eso importe. Una vez oí a un tipo recitar un poema que decía "Todo lo que vie es sagrado". Pero yo no quiero rezar por un anciano que ha muerto; el ya está bien. Si tuviera que rezar lo haría por los que todavía estan vivos y no saben que camino seguir. El abuelo ahora ya no tiene ese problema. Para él se acabaron todas las amarguras. cubridlo y dejadle que descanse en paz"


John Ford en un descanso del rodaje
Henry Fonda vistió de dignidad y principios la pobreza de su personaje Tommy Joad, un personaje violento ante la injusticia que apela a la solidaridad de todos para salir de aquella situación más que al marcado individualismo que reina por aquellas latitudes y Jane Darwell, que hacia de su madre. Ma Joad, (en el centro de la foto de entrada, junto a Henry Fonda) se llevó un Oscar por una soberbia y muy creíble actuación, que a todos nos llegaba al alma. La película está basada en una novela inmensa del gran John Steinbeck que ganó con ella un premio Pulitzer y más tarde un Nóbel de Literatura. "Las uvas de la ira" es sin duda una de las cimas de toda la literatura norteamericana.

John Ford se encargó de llevarla al cine y el resultado no podía ser otro que una obra de arte, para algunos más poética incluso que el libro, una película en definitiva indispensable para cualquier amante del buen cine. Ford se sintió directamente implicado en la historia y de ella contaba a Peter Bogdanovich en su famosa entrevista:

"Me gustó y nada más. Había leído la novela –que era buena– y Darryl Zanuck tenía un buen guión basado en ella. Me atraía todo: que tratase de gente sencilla y que la historia se pareciera al hambre de Irlanda, cuando echaron a la gente de las tierras y los dejaron vagabundear por los caminos para que se muriesen de hambre. Quizá tuviera que ver con eso –parte de mi tradición irlandesa–, pero me gusta la idea de esa familia que se marchaba, y trataba de encontrar un camino en el mundo"

Acerca de la maravillosa fotografía de la película, ese soberbio blanco y negro que parece hacer todavía más sombría la pobreza de los protagonistas, añadía:

"Gregg Toland trabajó estupendamente en la fotografía, cuando no había nada, pero nada que fotografiar, ni una sola cosa bonita, siquiera una buena fotografía. Le dije: “ Parte quedará negra, pero vamos a fotografiar. Vamos a correr un riesgo y hacer algo que resulte distinto”. Salió bien."

En el tratamiento del libro de Steinbeck se fue muy escrupuloso a la hora de trasladarla al guión cinematográfico pero se tomaron la licencia de cambiar el final de la película, que difería del dado en el libro y era ciertamente más esperanzador y poético. Ford, una vez que Fonda abandona a la familia por sus problemas con la ley comentaba sobre el giro dado al final:

"Era el final lógico, pero queríamos ver qué diablos pasaba con la madre, el padre y la chica; la madre tenía un pequeño soliloquio que estaba bien"

Un soliloquio que nos regalaba estas esperanzadoras palabras:

- ¿Qué te pasa Ma, tienes miedo?
Ma Joad - ¿Miedo? ¡Ja! No volveré a tener miedo jamás en mi vida. y ¿Por que? Ya nos han dado bastantes golpes, demasiados. Parece como si en todo el mundo no tuviéramos ya nada mas que enemigos, como si no tuviéramos un solo amigo. Eso me hacia sentir muy triste y tener miedo. Como si estuviera perdida y nadie me buscara.
John Joad - Tu eres la que nos das ánimos. Ya no servimos para nada y tu lo sabes. Me paso las noches y los días pensando en como eran antes las cosas, en un hogar. Nunca volveremos a tener un hogar.
Ma Joad - Oye John, la mujer se adapta mejor que el hombre. Los hombres vivís como si fuera a golpes. Nace un niño, muere alguien, a golpes. Tienes tu tierra y te la quitan, otro golpe. Pero la mujer vive las cosas más seguidas, como un río. hay remolinos y cascadas pero el agua sigue andando siempre. Las mujeres son de esa manera.
John Joad - Sí, quizá. pero ahora nos están golpeando mucho.
Ma Joad - Lo sé. Eso nos da fuerzas. Nacen y mueren nuevos ser y sus hijos nacen y mueren también, pero nosotros estamos vivos y seguimos caminando, no pueden acabar con nosotros ni aplastarnos. Saldremos siempre adelante porque somos la gente (el pueblo)”.




Un gran libro y una grandiosa película; en pocas, muy pocas ocasiones ocurre que estén a la par en un grado de excelencia como el aquí alcanzado... Steinbeck y Ford son palabras mayores.



La ficha de la película:

TÍTULO ORIGINAL The Grapes of Wrath
AÑO 1940
DURACIÓN 129 min.
PAÍS: EEUU

DIRECTOR John Ford

REPARTO Henry Fonda, Jane Darwell, John Carradine, Charley Grapewin, Dorris Bowdon, Russell Simpson, John Qualen

PREMIOS 1940: 2 Oscars: Mejor director, actriz secundaria (Jane Darwell). 7 nominaciones

PRODUCTORA 20th Century Fox. Productor: Darryl F. Zanuck

GUIÓN Nunnally Johnson (Novela: John Steinbeck)
MÚSICA Alfred Newman
FOTOGRAFÍA Gregg Toland (B&W) —



La despedida de Tommy Joad de su madre Ma Joad




El parlamento final de la película:




Las fotos han sido tomadas de las siguientes páginas:
1.- http://www.enclavedecine.com/2011/05/henry-fonda-%E2%80%93-red-river-valley-bso-de-%E2%80%98las-uvas-de-la-ira%E2%80%99-1940-de-john-ford.html
2.- http://cinodromo.blogspot.com.es/2012/11/las-uvas-de-la-ira-john-ford-estados.html

3.- http://anonimaveneciana.blogspot.com.es/2013/04/las-uvas-de-la-ira-de-john-seintbeck.html
4.- http://www.pasionporelcineclasico.com/las-uvas-de-la-ira/
5.- http://cinemafilmesclub.blogspot.com.es/2011/04/las-uvas-de-la-ira.html
6.- http://www.lacasitadealgodonales.com/blog/?p=1366
7.- https://uncinesocial.wordpress.com/2012/11/19/las-uvas-de-la-ira/

2 comentarios:

  1. Creo que la película acusa en su factura el paso del tiempo, pese a su indudable calidad. Yo recomendaría la novela, grandiosa e imprescindible.
    Saludos.

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  2. Yo revisioné la película hace unos días y no le encontré arrugas profundas por la edad. Me pareció cine del que uno echa de menos, cine de verdad.

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