" Busquemos juntos, si usted quiere, las leyes de la sociedad, el modo por el que esas leyes se realizan, el progreso por el que llegamos a descubrirlas. Pero, ¡por Dios!, después de haber demolido todos los dogmatismos a priori no soñemos, por nuestra parte, con adoctrinar al pueblo; no caigamos en la contradicción de su compatriota Martín Lutero, quien, desp
ués de haber derribado la
teología católica, se puso enseguida, con grandes refuerzos de
excomuniones y anatemas, a fundar una teología protestante. Desde hace
tres siglos Alemania no se ocupa de otra cosa que de destruir la
revocadura hecha por Lutero; no vayamos a preparar nuevas tareas para el
género humano con otras capas de yeso. Aplaudo de todo corazón su idea
de esclarecer todas las opiniones, hagamos una polémica buena y leal,
demos al mundo el ejemplo de una tolerancia sabia y previsora pero,
precisamente porque nosotros estamos a la cabeza del movimiento, no nos
hagamos jefes de una nueva intolerancia, no nos la demos de apóstoles de
una nueva religión, aunque ésta sea la religión de la lógica, la
religión de la razón. Acojamos y alentemos todas las protestas;
demostremos todas las exclusiones, todos los misticismos; nunca
consideremos una cuestión como agotada y, cuando hayamos gastado hasta
el último argumento, volvamos a comenzar, si es necesario, con la
elocuencia y la ironía. "
Imagen: Retrato de Proudhon, por Gustave Courbet
Imagen: Retrato de Proudhon, por Gustave Courbet
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.